Las carillas dentales son un tratamiento de estética dental cuya finalidad es corregir o mejorar la forma, el tamaño, la posición, el color y/o las fracturas de los dientes.

Primero se ha de realizar un estudio para valorar la necesidad de tratamientos previos adicionales, como es el blanqueamiento o la ortodoncia para maximizar el resultado. Eliminar o reducir cualquier hábito que suponga un riesgo para el tratamiento, como es el bruxismo, la dieta, tabaco, etc. 

Existen dos tipos de materiales:

Composite

• No requieren un limado dental
• Se realiza en una sola sesión
• Requiere de un pulido anual

Porcelana 

• Precisan de una mínima preparación dental
• Se realizan en  dos sesiones
• Se mantienen con el paso del tiempo

Para mayor durabilidad se aconseja realizar un mantenimiento anual, además de una férula de descarga, donde se hace un control oclusal para evitar sobrecargas y fracturas y de los ajustes del margen con la encía, y en el caso de los compositores un pulido en caso de oscurecimiento.